ALEMANIA.- Diciembre 13 de 2010.-Basta echar un vistazo al nuevo showcar de color Blanco Col de Turini para traer a la mente el recuerdo de otro legendario antepasado, el Sport quattro de 1984, un paso evolutivo del Audi quattro Coupé con 306 CV y batalla más corta. En realidad el Audi quattro concept también se presenta como una consecuente evolución de un coupé de serie con tecnología de vanguardia. Y es que está basado en el poderoso Audi RS 5, uno de los vehículos de fabricación en serie más deportivos en la historia de la marca.
En comparación con este coupé de cuatro plazas, los ingenieros de Audi han acortado la batalla 150 milímetros y han rebajado unos 40 milímetros la altura de la línea del techo; al igual que su antecesor de 1984, el showcar de 2010 es también un biplaza. La carrocería ha experimentado profundas modificaciones y se ha fabricado por completo en aluminio, mientras que el capó del motor y el portón del maletero se componen, al igual que otros componentes, de carbono.
El reducido peso de la estructura provoca grandes efectos secundarios en el resto de componentes del vehículo, como por ejemplo en el cambio, el tren de rodaje y el sistema de frenos.Como resultado, el Audi quattro concept, con un peso de 1.300 kilogramos, se encuentra prácticamente al mismo nivel que el Sport quattro de 1984. Audi, marca pionera en la construcción ligera, vuelve a colocarse así a la cabeza de sus competidores.
Y es que de ahora en adelante, el know-how y las tecnologías de la carrocería del quattro concept se aplicarán también a la cartera de productos de fabricación en serie de la marca de los cuatro aros.
En lugar del ocho cilindros de serie y en beneficio del peso total del vehículo, bajo el capó se esconde un motor de cinco cilindros en línea, basado en el que monta otro deportivo de Audi, el TT RS. El turbo FSI de montaje longitudinal rinde en el Audi quattro concept 408 CV (300 KW) de potencia y acelera al vehículo de 0 a 100 km/h en sólo 3,9 segundos. La dosificación del par en función de la demanda se lleva a cabo a través de un cambio manual de 6 marchas.
El Audi quattro concept traslada su fuerza a la calzada mediante la tracción integral permanente quattro de última generación. La innovación decisiva es el compacto y ligero diferencial central de corona, capaz de variar ampliamente la distribución del par entre el eje delantero y trasero. De este modo la tracción quattro transforma todo el par motor en cuestión de milésimas de segundo en un máximo permanente de placer de conducción y seguridad en marcha.
Por Raúl Farías D´H.; Destacados News