SANTIAGO.- Agosto 11 de 2011.- Ayer en dependencias de Aston Martin Santiago, en la comuna de Vitacura, William Norman, gerente de exportaciones de la marca británica, junto a Matias Velasco, director de Aston Santiago, fueron los encargados de presentar a los medios especializados, el modelo más lujoso y elegante de la firma: El Aston Martin Virage 6.0 V12.
Hermoso, dinámico y de prestigio, el Virage combina el desempeño de un auto deportivo de lujo con el confort y refinamiento de una berlina premium. Su distribución de peso, en proporcion de 50:50 entre ambos ejes, proporciona un balance perfecto.
«El Virage es el siguiente nivel de evolución en la estrategia de arquitectura de Aston Martin, y lo hace con toda la perfección que se puede esperar hoy. Es la perfecta síntesis entre confort, deportividad y elegancia», explica Matías Velasco.
En materia de diseño, sus faros bixenón siguen las líneas de los flancos del auto para conferirle un estilo fresco y moderno en la parte delantera. Una nueva máscara de metal de aluminio, inspirada en el One 77, cuenta con cinco paletas horizontales biseladas, lo que crea un perfil aerodinámico.
El nuevo parachoques delantero es de líneas puras, lo que ayuda a la simplicidad del conjunto. Las aletas delanteras distinguen al Virage de sus hermanos con la incorporación de seis elegantes LEDs. Los marcos, en tanto, transportan la misma simplicidad del parachoques delantero hasta el difusor trasero que permite que el Virage se apegue al piso.
El nuevo modelo, viene a ubicarse entre el elegante DB9 y el deportivo DBS, «cuenta con un motor V12 de seis litros de 490 HP de potencia a 6.500 rpm y una curva de toque muy pareja de 570 Nm. En su fabricación se emplearon materiales livianos como aluminio y magnesio. Las soldaduras son escasas, por cuanto se uso un pegamento de alta tecnología que es siete veces más resistente que una soldadura», aclara Norman. Va acoplado a una transmisión automática Touchtronic II de seis velocidades. El motor al estar situado delante del habitáculo, y en su mayor parte detrás del eje delantero hace que la mitad del peso recaiga sobre cada eje. Una particularidad de la caja, es que la pieza que transmite la fuerza del motor desde la caja de cambios a las ruedas traseras está hecha de fibra de carbono.
La estructura del Virage está hecha de aluminio, mientras que su carrocería es de aluminio, magnesio y algunas piezas de fibra de carbono. Su peso alcanza los 1.860 kg, tomando en cuenta sus 4.7 metros de longitud. Sus cifras de performance dejan helado a cualquiera: 299 km/h de velocidad punta y 4.6 segundos tarda en alcanzar los 100 km/h.
Como es tradición en Aston Martin, su interior ha sido trabajado prolijamente a mano, empleando 70 horas de labores. Se emplean siete cueros de vacas en el tapizado del habitáculo completo, provistos por la firma Bridge of Weir que cría ganado específico para ser empleado en estos autos. Según William Weir, «pueden pasar diez años, y al subirte seguiras sientiendo el olor a cuero».
Su exclusivo y sofisticado sistema de sonido Bang & Olufsen de 1.000 watts detecta cuando el auto va con una o dos persona abordo, por medio del click del cinturón de seguridad del acompañante, adecuando el sonido a la perfección para uno o dos ocupantes. En materia de equipamiento, incluye asientos calefaccionados, control de velocidad crucero y preparación para teléfono Bluetooth.
En materia de seguridad y tecnología, cuenta con cuatro frenos de disco de material cerámico, los que son mucho más livianos (12,5 kilos menos) y resistentes que los convencionales de fundición de fierro, dando al conductor un control tangible en la frenada. Cuenta también con un sistema de suspensión adaptable, él que inteligentemente «lee» la carretera para ofrecer un óptimo desempeño, adaptándose a sus diferentes condiciones. El sistema selecciona entre cinco configuraciones distintas en el modo normal, y otras cinco configuraciones más rígidas en el modo Sport.
Por su parte, el modo Sport permite variar la respuesta del motor a cada movimiento del acelerador, la rapidez de los cambios, además de evitar que el motor seleccione marchas largas cuando llega a altas revoluciones.
Por último el Sistema de Control Dinámico de Estabilidad (DSC), ha sido adaptado específicamente para el Virage. Una de las tres etapas del sistema, permite al conductor ajustar el nivel de intervención electrónico, según el tipo de conducción.
Por Raúl Farías D´H.; Destacados News
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