El jueves pasado estuvimos cubriendo las alternativas de un nuevo MINI Driving Experience, programa internacional de manejo de los modelos de la marca, con la finalidad de instruir conductores más seguros, que en nuestro mercado fue ofrecido por su importador y representante oficial, Comercial Gildemeister.
El objetivo del MINI Driving Experience es conocer las reacciones que genera el conductor frente al volante y educar sus reflejos para condicionar el instinto natural para sobrellevar con éxito maniobras imprevistas o de alto riesgo. En resumen, capacitar a los conductores para que aprovechen toda la tecnología de los vehículos y aplicarla.
El evento, que tuvo lugar en las instalaciones del Club de Planeadores de Vitacura en Santa María, comprendío una jornada completa que incluyó una clase teórica, magistralmente y una prueba práctica en pista, donde se simularon situaciones de riesgo en tránsito urbano, para aprovechar al máximo las posibilidades de probar los distintos sistemas de seguridad como los frenos con sistema antibloqueo (ABS), distribución electrónica de la fuerza de frenado (EBD), sistema de asistencia de frenado en curvas (CBC) y asistente de frenado, entre otros.
La flota MINI dispuesta en pista, constaba de seis vehículos, todos de la gama Cooper S: Tres MINI Cooper S, dos MINI Cooper S de cinco puertas y un MINI Clubman Cooper S, para vivir al máximo el karting feeling característico de la marca.
En el lugar del evento, se dispuso que el hangar principal fuese un área de Museo con la presencia de dos MINI Cooper de los años ’80 y `90, además de la presencia de pantallas gigantes LED que proyectaban imágenes históricas, un pequeño espacio dispuesto para dictar las clases teóricas, mientras que otro estaba destinado para revelar la novedad principal: el nuevo MINI Cabrio John Cooper Works de tercera generación, acerca del cual nos explayaremos en una nota aparte. En las afueras, tanto la prensa como los clientes, podían disfrutar de una especial exhibición de MINI 2017, con mesas y quitasoles para capear el sol intenso de ese día, mientras aguardaban su turno para pasar a la pista.
Dentro del mismo hangar, se habilitó una mini sala, donde asistimos a una charla conductiva dictada por el destacado piloto nacional, Manuel Paredes, quien por cerca de 10 minutos aconsejo a los asistentes sobre las mejoras técnicas para sacar el máximo provecho de estos pequeños cohetes de bolsillo: poastura de manejo (sentirse cómodo dentro del auto), y así tener una rápida reacción al momento de tomar las curvas, acelerar, no ser brusco con el auto, ser suaves con los cambios y tratar de lograr la mayor eficiencia posible para sentir la sensación de los neumáticos en el asfalto.
La prueba en pista
Luego de aguardar nuestro turno, abordé en calidad de pasajero junto a otro colega del Grupo Copesa, un flamante Countryman All4 1.6 litros con 184 caballos, enfilando a la pista de pruebas con un habilidoso instructor de pruebas. circuito que partía por el costado de toda la recta del aeródromo. Este consistía en una recta de unos 200 metros, luego curva a la izquierda y derecha, un slalom y otra recta pequeña para luego retomar con una larga curva hacia la derecha que llevaba a la pista de aterrizaje del aeródromo.
Luego de unos 400 metros una serie de curvas a la izquierda y a la derecha con un frenaje intermedio. Luego unos metros más abajo nuevamente unos slalom pero a meyor velocidad para luego retomar una recta de unos 600 metros para llegar a un frenaje brusco. Luego curva a la derecha y dos pequeñas rectas más con conos para frenadas violentas.
Pero las características únicas de MINI hacen que todos estos ejercicios se ejecuten de forma más fácil y divertida, pues MINI es un modelo predestinado a buscar los límites. Además de su potente motor, el chasis optimizado de MINI es determinante al momento de conducir pues gracias a todas sus innovaciones, acentúan la sensación de estar conduciendo un kart.
Su tracción integral y un gran ancho de vías, entregan gran maniobrabilidad y agilidad. Las columnas telescópicas McPherson del eje delantero se encargan de guiar las ruedas de modo imperturbable. La dirección se mantiene precisa, ya sea al conducir rápidamente en la recta o al acelerar y frenar. El eje posterior central de brazos oscilantes es único en este segmento automovilístico. Gracias a su sofisticada aceleración, las ruedas se adhieren siempre de modo óptimo a la calzada. Las barras estabilizadoras contribuyen adicionalmente a la agilidad y seguridad de la gama MINI.
Fotos: Raúl Farías.-