El presidente ejecutivo de Nissan Motor Co, Carlos Ghosn, dijo el viernes que espera que la automotriz japonesa alcance un récord de ventas en el 2017, que sería un buen año para la industria pese a la volatilidad en los mercados de divisas y materias primas.
Ghosn también dijo que confía en que la política comercial de Estados Unidos bajo el presidente electo Donald Trump siga promoviendo unos lazos sólidos con México, donde Nissan opera plantas de producción.
«Creo que el 2017 debería ser un buen año. Pienso que vamos a ver un crecimiento económico razonable, sobre todo en la industria del automóvil (…) Creo que vamos a establecer un récord de ventas en el 2017», dijo a la prensa.
Un aumento en los precios de las materias primas utilizadas para fabricar automóviles, junto con las fluctuaciones en el yen y otras divisas presentaría riesgos para la industria, pero esto se compensaría con una tendencia de expansión en las economías globales y mantendría una sólida demanda de vehículos, explicó.
Ghosn dijo que no está «muy preocupado» por el futuro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que Trump se ha comprometido a renegociar.
La firma japonesa y sus rivales podrían enfrentarse a los riesgos de una modificación del pacto, o de que Trump fije aranceles a los vehículos importados desde México.
«Lo que ha dicho el presidente estadounidense es ‘Estados Unidos primero’ (…) Tenemos que creer que el programa es acerca del interés de Estados Unidos, y su interés incluye unas relaciones comerciales sólidas con México», sostuvo Ghosn.