El proveedor de bolsas de aire, Takata, sigue provocando dolores de cabeza. Ahora nuevamente le correspondió el turno a la nipona Toyota, quien hizo un recall a nada menos que tres millones de unidades, los que podrían poner en riesgo la seguridad de los ocupantes de esos vehículos en caso de accidente.
La mayor parte de las unidades afectas a este llamado, corresponden a Auris, el SUV RAV4 y Yaris. La compañía desglosa las unidades en: 750.000 comercializadas en Japón, 650.000 en China, 350.000 en Europa y 1.160.000 en el resto del orbe. La buena noticia es que el mercado norteamericano quedó exento de este llamado.
Recordemos que el caso Takata se remonta a 2014, cuando empleados de esa firma reconocieron defectos en el sistema de inflado, manipulando los resultados con el fin de convencer a 14 fabricantes a que los montasen en sus vehículos.