El último viernes de abril, circulando en labores reporteriles por Av. Vitacura, divisamos casualmente, un Honda Civic muy particular, estacionado discretamente en World Cars, el que se diferencia del sedán por cambios evidentes en su zaga. Se trataba sin duda de un Civic Hatchback de cinco puertas, importado directamente desde los EE.UU. por Juan Bucovich, dueño de World Cars, automotora especializada en importar autos exclusivos. No podíamos perder esta oportunidad de poder conocerlo en detalle el ejemplar correspondiente a la versión EX-L Navi en color Gris Plata lunar. Todos los Civic Hatchback proceden de la factoría qu Honda tiene en el Reino Unido. Debemos consignar que Honda Motor Chile no tiene planificado, al menos en el corto o mediano plazo incorporar a su portafolio de producto esta variante del Civic.
Partimos esta nota señalando que el desarrollo de la décima generación de este modelo, significó un sustantivo avance de Honda en el segmento C, puesto que se vió beneficiado por el programa de investigación y desarrollo más exhaustivo desarrollado por este fabricante en toda su historia. El Civic es un modelo clave para la marca en muchos mercados, varios de ellos importantes como el europeo y el estadounidense. Es por ello que su renovación debía marcar una diferencia clara con el resto de sus competidores.
Este modelo gracias al empleo de una plataforma monobloque, más ancha y más larga, logra tener un espacio interior líder en su clase, donde era necesario aplicar nuevos planteamientos y enfoques en la fabricación de su carrocería, aerodinámica y diseño del chasis. Es por ello que el equipo de desarrollo se apoyó en el lema básico del proyecto: «Otokomae», que encarna la gracia, elegancia y la belleza interior.
Analizando sus líneas, y haciendo un breve ejercicio de comparación con el sedán, encontramos que su frontal luce audaz y llamativo, sobre todo por la presencia de sus luces LED diurnas. Su máscara luce deportiva y elegante a la vez, donde destaca la máscara prominente en color negro piano, que se funde con la zona superior de las luces principales.
Otras diferencias en su proa las encontramos en la parte inferior del paragolpes, que se ve más agresiva debido a la inclusión de tomas de aire tipo panal de abejas, sumado a la presencia del piano black en los neblineros y la ornamentación que los rodea.
De costado, las diferencias se aprecian en las puertas laterales traseras que prescinden de la tercera ventanilla, al igual que la terminación de las luces traseras. Se desliza sobre neumáticos Continental Procontact de medida 215/50 R17, con llantas de aleación de diseño aerodinámico y bordes distintivos.
Sin embargo, es en su zaga donde yacen los principales elementos diferenciadores entre ambas tipologías: partiendo por la antena tipo aleta de tiburón del HB, un alerón flotante que se encuentra en la parte alta del vidrio trasero, él ya citado limpialuneta posterior, ópticos traseros en forma de C, con micas blancas o transparentes. Un segundo alerón, ubicado en el portalón, incorpora la tercera luz de freno. Su superficie sólo lleva el monograma cromado «Civic», siempre al costado izquierdo del portalón, prescindiendo del emblema VTEC Turbo, presente en el sedán.
Por último, en el parachoques vemos que luce más agresivo por la disposición vertical de las luces reflectoras y la presencia de un difusor de aire mucho más deportivo en negro brillante y resina, que contrasta con el color del resto de la pieza.
En resumen, vemos que su estilo atlético destaca por una proporciones anchas y de perfil bajo, que le dan una mayor presencia al Civic HB. Dimensionalmente, es 113 mm más corto y 3 mm más alto que el sedán. Sus cotas llegan a los 4.518 mm de ancho; 1.799 mm de ancho (con los espejos externos plegados) y 1.434 mm de alto. Su batalla alcanza los 2.697 mm.
Su habitáculo se caracteriza por una dsitribución sencilla y despejada, sumado a la presencia de nuevas tecnologías, un alto nivel de sofisticación y materiales de gran calidad. De partida, comprobamos que el puesto de manejo tiene una posición más baja (35 mm más baja que la de su predecesor), dando una mayor sensación de conexión con el auto, además de disponer de una visibilidad delantera mejorada, producto de la rebaja de 65 mm del capó, sumado a la reducción del ancho del pilar A en 12 mm, pudiendo ofrecer un arco de visión de 84.3º.
El ambiente interior se ve reforzado por una tapicería acabada con materiales de altacalidad, además de un panel de instrumentos de una sola pieza y muy suave al tacto, y costuras moldeadas y tejidos de primera calidad en los asientos.
Apreciamos que respeta la reputación del modelo con más de 40 años de historia, al combinar gran espacio tanto para los ocupantes como para el equipaje. Pesquisamos que la capacidad de carga de su portamaletas oscila entre los 478 a 1.245 litros, dependiendo de si abatimos o no los respaldos de los asientos posteriores.
Tomando en cuenta la importancia que ha adquirido la presencia de sistemas de infoentretenimiento en los autos actuales, el Civic HB dispone de un sistema de audio con pantalla táctil de 7″ de alta resolución (Sistema Honda Connect), con ajuste personalizado de funciones, compatible con AndroidAuto y Apple Car Play.
Pero más llamativo nos resultó su particular cuadro de instrumentos, que incluye un tacómetro y velocímetro digitales, sumado a la presencia de un completo computador de abordo, que puede alternar información sobre el sistema de audio, contactos del teléfono, información del trayecto y de mantenciones periódicas.
Dicha pantalla va flanqueada por dos de menor tamaño: el indicador del nivel de combustible (lado derecho) y de la temperatura del refrigerante del motor (lado izquierdo). Basta con subirse al auto, para que el los instrumentos se iluminen de manera progresiva dando una cálida y sofisticada bienvenida a su puesto de mando.
Una sutil diferencia que encontramos respecto del sedán, en relación a su equipamiento de confort, es la presencia de asientos calefaccionados delanteros con tres niveles de ajuste.
Bajo el capó encontramos un motor Turbo VTEC de 1.5 litros con cuatro cilindros y sistema de inyección directa de combustible, en el que se emplearon una serie de tecnologías avanzadas a fin de optimizar la potencia y el ahorro de combustible, así como mejorar su capacidad de respuesto. Para ello los ingenieros de Honda se centraron en reducir el peso del motor y la fricción interna. Este motor entrega 174 HP a 6.000 vueltas y un par de 220 Nm disponibles cuando el tacómetro se mueve entre las 1.700 y 5.500 revoluciones.
Va acoplado a una caja automática CVT, la que fue rediseñada para ser integrada a los motores turboalimentados, luego de dos años de arduo trabajo realizado por el de I+D de Honda en Frankfurt (Alemania). Esta caja se caracteriza por ofrecer una respuesta más lineal, que es similar a la que encontramos en cajas automáticas de doble embrague actuales.
En el mercado norteamericano, el Civic HB se ofrece en cinco niveles de equipamiento: LX, Deportivo, EX, EXL-NA V (ejemplar que ilustra la presente crónica) y Sport Touring. Sobre el equipamiento de serie presente en el EXL-NAV, podemos señalar:
- Climatizador.
- Cámara de reversa multiángulo.
- Neblineros delanteros.
- Techo eléctrico.
- Pantalla de audio táctil de 7″.
- Honda Lane Watch.
- Encendido remoto del motor.
- Interior de cuero.
- GPS.
- Asientos delanteros calefaccionados.
- Asiento del conductor con ajuste eléctrico.
World Cars comercializa esta unidad a pedido, vía importación directa a un valor de CLP $21.900.000.
Fotos: Raúl Farías; Honda Civic 1.5 EXL-Nav en Gris Plata lunar.