La Toyota RAV4 puede ser considerada como la SUV más vendida en muchos mercados en los que está presente, incluso el nuestro. La actual generación, cuyo último «Facelift» tuvo lugar a finales de 2015, ya empezaba a dar pequeños signos del paso del tiempo. Pero el líder no tiene razón para quedarse dormido en los laureles, y es que Toyota aprovechó la vitrina del Salón del Automóvil de Nueva York, para presentar la quinta entrega de este exitoso modelo.
Sin duda que el modelo creció en tamaño, y en Toyota lo explican por el paso desde la plataforma C a la K (la misma que usan el Camry y Avalon), pero se trata de la TNGA (Plataforma de arquitectura modular). Sus cotas alcanzan los 4.595 mm de largo (+5mm), mientras que su ancho ahora llega a los 1.854 mm (+10mm), Su altura se incrementó en 12 mm, totalizando 1.699 mm. Su batalla experimentó un notable alargamiento de 30,5 mm, llegando a los 2.690 mm. Toyota informa que su carrocería es un 57% más rígida.
La nueva RAV4 presenta un diseño totalmente nuevo que aboga más por la deportividad, con un frontal prominente y anguloso, luces LED delanteras y traseras, mientras que de costado, luce más todoterreno con sus pasos de ruedas semioctogonales con aplicaciones de resina negra, mientras que los espejos laterales abandonan el pilar A, para dar paso a unos tipo banderín. Su zaga exhibe un deportivo spoiler superior, que da paso a los «Privacy Glass» posterior y laterales traseros. Las luces traseras también son LED, manteniendo de cierta manera el diseño de las que vemos en la generación saliente. El parachoques trasero va casi en su totalidad revestido en resina negra.
Por dentro, la RAV4 mantiene su generosa habitabilidad para cinco ocupantes, más espacio para la cabeza y una evidente preocupación por los detalles y la calidad percibida, lo que se aprecia en nuevos elementos como el freno de mano eléctrico, cargador del celular por inducción, la presencia de dos tipos de pantallas de infoentretenimiento: 7″ u 8″, cinco puertos USB, además de la alternativa de un sistema de sonido JBL con 11 altavoces.
Mecánicamente, equipa un nuevo motor llamado Dynamic Force, de 2.5 litros con sistema de inyección directa, que ahora entrega 203 caballos de fuerza, asociado a una nueva caja automática de ocho relaciones. Para las variantes híbridas, el motor a gasolina está acoplado a un motor eléctrico y una nueva transmisión CVT, que en conjunto entrega 176 caballos.
La RAV4 2019 es el primer modelo en la plataforma TNGA que tenga tracción integral. También será el primer Toyota en contar con vectorización de torque dinámico con Driveshaft Disconnect. Este sistema envía hasta el 50 por ciento de la potencia a las ruedas traseras cuando se necesite, así como a cada rueda individual. Driveshaft Disconnect detiene la potencia de llegar a las ruedas traseras cuando no se necesita, automáticamente haciendo al vehículo más eficiente. Las versiones más bajas obtendrán la tracción total sin la vectorización de torque y los híbridos tendrán un sistema AWD actualizado.