Al igual que han venido haciendo durante décadas, los ingenieros de Opel han estado probando el Corsa de próxima generación durante varios meses en la Laponia sueca, a unos 40 kilómetros al sur del Círculo Polar Ártico. Entre otros, los ingenieros expertos del departamento de control de chasis han estado configurando los sistemas controlados electrónicamente para la estabilidad, la tracción y el antibloqueo de frenos en superficies de bajo agarre y a temperaturas tan bajas como -30°C.
El propósito de estas pruebas extremas es que independientemente del hielo, la nieve, el aguanieve o el asfalto, y los diferentes niveles de agarre en ambos lados del automóvil, los sistemas de control siempre deben funcionar de manera fiable. Y, al mismo tiempo, ofrecer altos niveles de seguridad, confort y dinámica de conducción, para lo que los ingenieros de Opel están recalibrando el sistema de chasis hasta en sus mínimos detalles, para que el sistema de control de estabilidad y frenado hagan que el autosea “divertido de manejar”.
En el Círculo Polar Ártico, las condiciones para llevar a cabo tal ajuste fino son más adecuadas que en cualquier otro lugar. Por lo tanto, los ingenieros dan vueltas repetidamente en la pista de handling, en el óvalo de alta velocidad y superficies especialmente preparadas, optimizando continuamente los sistemas de control.
Las pruebas con automóviles fuertemente camuflados en las vías públicas de Laponia comenzaron justo después de Navidad. Desde enero hasta marzo, el hielo en los lagos helados tenía un espesor de alrededor de un metro, por lo que los autos de prueba, los quitanieves y los camiones de aspersores de agua podrían circular sobre la superficie.
Las largas noches polares, han permitido a los ingenieros probar ampliamente la tecnología adaptativa de iluminación IntelliLux LED, que después de ser una primicia en sus respectivos segmentos al debutar en el Astra y en el Insignia, estará disponible por primera vez en el segmento del nuevo Corsa.
El clima y el ambiente en el norte de Suecia, han hecho posible evaluar y optimizar con precisión los faros matriciales de iluminación LED, los cuales se adaptan de forma continua y automática a las situaciones del tráfico y al entorno sin provocar deslumbramientos a los demás usuarios de la vía, al simplemente «recortar» del área iluminada los vehículos que se aproximan en sentido contrario y los que circulan por delante.