Sin duda que Citroën, desde hace un tiempo está embarcada en una gran ofensiva de productos, puesto que a la presentación del C4 el año pasado, ahora se suma la llegada de un modelo único: el totalmente nuevo C5 X, con el que el fabricante galo quiere volver al segmento de los sedanes medianos.
Recordemos que el fabricante a mediados del 2000 tuvo como buque insignia al recordado C6, que luego siguió con la nueva generación del C5, hasta que este fue descontinuado hace un par de años en el Viejo Continente.
Pero, ¿ a que obedece el cambio de denominación? En Citroën explican que ellos metieron en una juguera tres tipos de siluetas: sedán, station wagon y un SUV, del cual resulta el nuevo C5 X, un modelo pensado con una doble finalidad: primero, marcar presencia en el gran mercado chino, donde el fabricante quiere dejar atrás una década de malos resultados, y en segundo término marcar el retorno de la firma al segmento de las berlinas medianas en Europa.
Algunas luces en relación a lo anterior nos brinda el Director Ejecutivo de Citroën, Vincent Cobée: «Este nuevo modelo está pensado para aquellas personas que gustan manejar con una postura de manejo más alta, es fácil subirse y bajarse de él, pero no quiere tener un SUV. También tiene la funcionalidad propia de un station wagon o break».
En cuanto a su estética, la silueta del C5 X impone de inmediato: con personalidad, bien plantado sobre sus cuatro ruedas, robusto y estatutario. Renovando los códigos del segmento D, se trata de una carrocería inspiradora con portón trasero, que sintetiza las ventajas de la berlina y del break añadiendo, además, elementos propios de los SUV. Es una carrocería nueva, diferente, en la que se ha prestado especial atención a la aerodinámica. No olvidemos que este modelo está inspirado en el conceptual CXperience presentado en el Salón de París de 2016.
Su largo capó, sus líneas fluidas y aerodinámicas, su cintura elevada y su caída detrás de las ruedas traseras aportan distinción y dinamismo; además, todos estos elementos son guiños a los modelos que han marcado la historia de la gama alta de Citroën.
El habitáculo del C5 X transmite una verdadera impresión de calidez, de serenidad y de espacio y supone una invitación a viajar gracias a sus generosos volúmenes, la sensación de bienvenida, el cuidado de los detalles y un aspecto práctico inédito. La elegancia y el confort, asociados a una tecnología innovadora pero discreta son las claves de este habitáculo acogedor, en la más pura tradición Citroën.
En su cabina destaca la presencia de un cuadro de instrumentos digital, a la que se suma una enorme pantalla táctil de 12″, la que preside la consola central con una disposición horizontal.
El C5 X propone lo mejor que existe en la actualidad en el ámbito de la conducción semiautónoma de nivel 2 en el marco de la legislación en vigor: el Highway Driver Assist que combina el regulador de velocidad adaptativo con función Stop & Go y la ayuda del mantenimiento de carril: la persona que conduce no necesita gestionar la velocidad o la trayectoria puesto que el vehículo se ocupa del conjunto de funciones.
Numerosos dispositivos añadidos facilitan, asimismo, la conducción cotidiana como, por ejemplo, el control del ángulo muerto de larga distancia, el Rear Cross Traffic Alert, que detecta los vehículos u otros peligros que se acercan al insertar la macha atrás, el Top 360 Vision que facilita las maniobras mostrando en la pantalla táctil el entorno exterior del coche o el acceso y puesta en marcha manos libres Proximity que abre y cierra automáticamente las puertas cuando el conductor se acerca al vehículo o se aleja de él.
El C5 X, disponible con motores térmicos de gasolina o híbrido enchufable, se comercializará en el 2º semestre de 2021.
Fotos: Citroën Media