A finales de marzo pasado, Honda presentó vía secretaria (comunicado de prensa) la nueva generación de su sedán compacto City. Ya habiendo abandonado el período de cuarentena más estrictas en algunas comunas del Gran Santiago, la marca aprovechó el desconfinamiento progresivo, para realizar el lanzamiento presencial, con todas las providencias del caso (incluso hasta con un test rápido) de la renovación de media vida de su camioneta mediana, cuya segunda camada está presente en Chile desde enero de 2017.
Honda con Ridgeline aceptó el desafío de tener una camioneta única, cuyo rediseño se basó en escuchar las opiniones vertidas por los clientes. Ridgeline tenía dos pequeños peros: sus clientes la encontraban algo delicada y que carecía de la robustez o apariencia clásica de este tipo de vehículos. De ahi los retoques estéticos y las mejoras aplicadas en su equipamiento.
Cabe señalar que los objetivos que Honda se trazó con la segunda generación del modelo eran: que fuese una camioneta confiable, cómoda y segura, capaz y versátil, junto con una apariencia que denotase personalidad, en donde el conductor se sintiera bien. Combina lo mejor de dos mundos: el confort de los SUV con las prestaciones de una camioneta. Llega en versión única asociada al nivel de equipamiento RTL a un precio de $39.853.100 IVA incluido.
Para el año modelo 2021, la Ridgeline cuenta con láminas de metal completamente nuevas desde los pilares del techo delantero hacia adelante, incluido un nuevo capó más abultado, una nueva parrilla en posición vertical y frontal, y nuevos pasos de ruedas delanteros.
Flanqueando la parrilla encontramos nuevos faros LED más brillantes divididos en dos por la barra transversal cromada encima de la parrilla. El parachoques delantero inferior del color de la carrocería acentúa aún más el nuevo y resistente aspecto de la Ridgeline con una placa protectora prominente y ventilaciones laterales anchas que crean cortinas de aire para dirigirlo a través del parachoques y alrededor de las llantas y ruedas delanteras para mejorar el rendimiento aerodinámico.
Un parachoques trasero remodelado expone nuevas y agresivas salidas de escape dobles, junto con nuevas llantas de 18″ de aspecto más resistente, que enfunda neumáticos de medida 245/60 R18 y un ancho de vía adicional de 20 mm para darle a la Ridgeline una postura más amplia y plantada.
Ridgeline se ofrece en cuatro tonalidades: azul obsidiana perlado, blanco perlado, gris grafito metálico y gris plata lunar metálico. Nos hubiese gustado que se ofreciera en el nuevo Radiant Red Metallic a su paleta de colores exteriores.
Sus dimensiones y capacidades, siguen siendo las mismas: 5.335 mm de largo; 1.997 mm de ancho y 1.798 mm de alto. Su distancia entre ejes llega a los 3.180 mm. Su despeje libre es de 200 mm, mientras que sus ángulos de aproximación, ventral y de salida, son de: 20,1°, 19,6° y 22,1°. Su área de carga admite hasta 692 kilos de vituallas, mientras que su capacidad de remolque es de 2.267 kilos.
A nivel de equipamiento, la versión 2021 suma asientos delanteros calefaccionados, asiento del conductor con dos memorias de ajuste, cargador de teléfono celular inalámbrico, además de una nueva transmisión automática de 9 velocidades con tecnología Shift By Wire, que le permite ganar espacio interior, junto con entregar una mejor entrega de potencia y una experiencia de manejo superior.
En el interior, la Ridgeline 2021 agrega una perilla de volumen físico para el sistema de audio. Además, todas las molduras Ridgeline tienen nuevas costuras de contraste en los asientos. Nuevos son los acentos en el tablero, el volante y la consola central.
Su espaciosa cabina ofrece comodidad para los pasajeros de primera clase y espacio para las piernas en el asiento trasero, con un piso plano y asientos traseros abatibles divididos 60/40, lo que ofrece una mayor flexibilidad para llevar artículos largos y altos.
Un motor VTEC V6 de inyección directa de 3.5 litros y 280 caballos de fuerza respaldado por una transmisión automática suave y sensible de 9 velocidades impulsa a la Ridgeline, con la tracción total con vectorización de par i-VTM4 ahora estándar en toda la línea. El sistema i-VTM4 envía automáticamente hasta el 70 por ciento del par a las ruedas traseras y distribuye continuamente el 100 por ciento de esa torsión entre las ruedas traseras izquierda y derecha según las condiciones de conducción en cada rueda.
El sistema de gestión de tracción inteligente estándar de Ridgeline optimiza aún más la entrega y distribución de la potencia en diversas condiciones, incluido el pavimento (modo normal), la nieve, el barro y la arena.
Por último, en el apartado de seguridad activa, ahora viene de serie con el conjunto de tecnologías de seguridad y asistencia al conductor Honda Sensing, que incluye: Collision Mitigation Braking System (CMBS) con Advertencia de colisión frontal (FCW), Sistema de asistencia para mantenerse en el carril (LKAS), Mitigación de salida de la carretera ( RDM) con advertencia de cambio de carril (LDW) y control de crucero adaptativo (ACC).
Fotos: Raúl Farías; Honda Ridgeline FL 3.5 RTL AT 4×4 Sensing en Gris Plata Lunar Metálico