En el marco de la gira presidencial del Presidente de Argentina, Alberto Fernández por Francia, Stellantis confirmó un importante plan de crecimiento en el país trasandino con nuevas inversiones.
El plan prevé el desarrollo de nuevos mercados de exportación para los vehículos fabricados en Argentina, como así también inversiones para la nacionalización de componentes producidos por pymes autopartistas, lo que generará de forma inminente, y solo en una primera etapa, más de 100 nuevos empleos en la cadena de proveedores y mayor integración nacional en los modelos Fiat Cronos y Peugeot 208 fabricados en ese país.
Producto de esas inversiones de capital, Stellantis espera fabricar del orden de las 160 mil unidades en Argentina, incrementando en más del 300% los números del Grupo en tiempos de prepandemia.
Aterrizando el anuncio de Stellantis al mercado chileno, el principal cambio vendría de la mano del cambio de origen del Peugeot 208, con origen europeo, que pasaría ser de procedencia argentina, algo que a nivel de la subsidiaria chilena (Peugeot Chile) no veíamos desde los tiempos de los modelos 206 y 207 Compact, a excepción de la reciente incorporación a su catálogo de productos de la camioneta mediana Landtrek.
¿Qué se sabe del 208 «Made in Argentina»?
El Grupo Stellantis desembolsó, en marzo de 2017, nada menos que USD 320 millones en la remodelación de la planta El Palomar, ubicada en la capital Buenos Aires, para efectos de que estuviese apta para fabricar el 208 en base a la plataforma CMP.
El plan de transformación se inscribe en coherencia con la ambición del plan «Push to Pass», con objetivos claros para el Grupo en la región América Latina: un crecimiento rentable, el lanzamiento de numerosos nuevos vehículos en el Mercosur, la duplicación de los volúmenes de ventas fuera del Mercosur y un programa agresivo de integración local.
Esta transformación incluyó la incorporación del flujo multi-siluetas con una logística full kitting y la integración de la nueva plataforma CMP (Common Modular Platform). Los proveedores se integraron en el centro del establecimiento industrial para reducir los costos logísticos y optimizar toda la cadena de valor.
Para efectos de realizar una comparación objetiva entre ambos orígenes, nos basamos en la información contenida en las fichas técnicas de los modelos de ambas procedencias: europeo que aún se vende en Chile y el argentino, llegando a las siguiente conclusiones:
- En cuanto a sus dimensiones mantiene el largo en 4.055 mm; el ancho en 1.745 mm (con los espejos abatidos), mientras que su altura aumenta en 23 mm hasta los 1.453 mm, producto de ajustes en su suspensión para hacerlo más apto para los caminos de este lado del mundo. Su batalla anota una ligera reducción de 2 mm, totalizando los 2.538 mm
- La oferta de llantas va desde las 15″ a las 17″, quedando éstas últimas reservadas para los acabados GT
- La capacidad del estanque de combustible pasa de los 44 litros en el europeo a los 47 litros para el de origen argentino, atendiendo que se recorren distancias mayores
Del otro lado de Los Andes, el 208 se ofrece en seis niveles de equipamiento, los que a saber son: Like, Like Pack, Active, Allure, Feline y GT, contra una gama más simplificada en Chile, conformada por Active Pack, Allure Pack y GT. Tendremos que confirmar con Peugeot Chile cuál será el versionado definitivo del modelo.
En lo que respecta a la oferta motriz, en Argentina se ofrece únicamente en variantes a gasolina de la familia de motores EB2 de 1.2 litros con 82 CV de potencia y 118 Nm de par, acoplado a una transmisión manual de 5 marchas. Se trata de un propulsor más Ecológico (-25% de CO2), Performance (mejor compromiso entre Par a bajo régimen y potencia) y peso (-25%) más liviano que un motor 4 cilindros. Peugeot indica que este motor es fabricado en la planta de Tremery en Francia.
Para los clientes que busquen un poco más de brío en la performance del vehículo, contarán también con el 1.6 VTi de 115 cv. En efecto es el mismo propulsor que anima a los Citroën C-Elysée y Peugeot 301. Según versión, se ofrece con alternativa de transmisión manual de 5 velocidades o una automática de seis.
Este bloque recibió una evolución técnica para poder ser adaptado en el vano motor de la nueva plataforma CMP y así cumplir con las reglamentaciones de pruebas de choque peatón. Las modificaciones puntualmente se concentraron en compactar el alto de motor, en donde se intervino principalmente sobre el embellecedor de la tapa de válvulas y el cárter de aceite.
Para las versiones GT y GT Line está reservada una variante turbo a gasolina de 1.2 litros Puretech con 1.199 c.c. y 130 Hp de potencia, además de un par de 230 Nm, asociado a una transmisión automática de seis velocidades.