Diseñada entre Porsche y Audi, la plataforma PPE para vehículos totalmente eléctricos plantea grandes ventajas. La versatilidad de la nueva arquitectura en términos de batalla, ancho de vías y altura libre al suelo, permite su adaptación a una gran variedad de pertenecientes a distintos modelos. Esta flexibilidad, al mismo tiempo, hace que la marca pueda conservar el carácter fuerte e independiente en sus nuevos vehículos.
El primer Porsche basado en la plataforma PPE será el Macan totalmente eléctrico. Con su sistema de 800 voltios, su potente motor eléctrico de última generación y su gestión de la batería y de la carga, este coche ofrece el rendimiento característico de los modelos E-Performance de la marca. El sucesor del exitoso SUV compacto será el modelo más deportivo de su segmento. Entre sus objetivos figuran alcanzar una gran autonomía, una carga rápida del alto rendimiento y un elevado nivel de prestaciones, disponible de forma continuada.
Para las variantes más deportivas, los ingenieros están diseñando una experiencia de conducción muy dinámica mediante la integración de un bloqueo de diferencial trasero electrónico totalmente variable y también mediante el denominado eje trasero “Performance”. A esto se suma un potente motor eléctrico situado detrás del eje posterior.
Todo ello permite implementar una tracción total que funciona en un amplio espectro y que da prevalencia al eje trasero. En combinación con el sistema de distribución dinámica del par, aporta un gran dinamismo al acelerar la salida de las curvas.
La plataforma PPE admite tracción trasera y total, y varios niveles de potencia. El sistema de propulsión aparecerá alrededor de 612 CV, con un par máximo superior a 1.000 Nm.
Igual que el Taycan, la próxima generación del Macan contará con la tecnología de 800 voltios. Esta arquitectura de alto voltaje asegura unas prestaciones elevadas de manera continua, acorta significativamente el tiempo de carga y reduce tanto el peso de los cables como el espacio requerido para ellos.
También es común a la berlina deportiva el tipo de motor eléctrico, que es síncrono de imanes permanentes (PSM) con bobinado en horquilla. En este diseño, el rotor está equipado con imanes que generan un campo magnético natural. En comparación con los motores asíncronos (ASM), los PSM ofrecen mayores cifras de potencia y par, una eficiencia más elevada y una gran capacidad de recuperación de forma continuada, lo que permite que la máxima aceleración esté disponible varias veces consecutivas.
El Macan totalmente eléctrico solo empleará el motor síncrono de última generación. Para optimizar la densidad de potencia, incorpore un sistema de refrigeración mejorado frente al Taycan. Otra ventaja es la nueva disposición de los imanes dentro de los rotores, que se conoce como laminación en “doble V”.
La potencia de electrónica también ha dado un gran paso adelante: para aumentar su eficacia, ahora emplea carburo de silicio (SiC) en lugar de silicio como material semiconductor en el inversor de pulsos (PWR) del eje trasero. Esto reduce significativamente las pérdidas en el inversor y permite que las frecuencias sean más altas.