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El Audi Q8 se pone al día sin perder su ADN

Considerado el buque insignia de la marca de los cuatro aros, el Q8 ya tiene a su haber cuatro años de vida comercial, con su inconfundible estilo de SUV/ Coupé, por lo que el reciente Salón de Münich fue aprovechado para el debut de su discreta actualización de media vida, cuyos detalles desgranaremos en esta nota.
Audi ha reducido sistemáticamente los elementos decorativos para lograr un diseño aún más puro. Para distinguir a primera vista el paquete exterior S line y el modelo S, el protector inferior de la carrocería, el embellecedor de las puertas y el difusor del modelo básico están acabados en un color de contraste que enfatiza su aspecto robusto todoterreno.
Otra novedad son sus llantas bidimensionales, ya vistas en el Q8 e-tron. En lugar de cromados, el nuevo logo con los cuatro aros está acabado en colores blanco y negro; como parte del paquete de óptica negro plus, el blanco se reemplaza por un gris oscuro que sigue pareciendo negro brillante. En el Q8 el pilar B lleva ahora también el identificador del modelo, el derivado y la tecnología.
La gama de motores, todas con sistema MHEV de 48v, reducida a tres alternativas: dos diésel y una a gasolina, conocidos como 45 y 55 TDI Quattro y el 55 TFSI Quattro.