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Mazda impulsa la creatividad y el vínculo comunitario con su proyecto “Mazda Colores que mueven”
La iniciativa de muralismo participativo, creada junto al artista Payo Söchting, interviene escuelas en distintas regiones del país, impactando a más de 400 estudiantes y proyectando su expansión para 2026.

Mazda Chile presentó “Mazda Colores que mueven”, un innovador proyecto de muralismo participativo que busca transformar espacios escolares mediante el arte, el diseño y el trabajo colaborativo con diversas comunidades educativas. La iniciativa, desarrollada junto al ilustrador y muralista chileno Payo Söchting, embajador de la marca, ya está activa en tres establecimientos del país y pretende consolidarse y crecer durante 2026.
La primera etapa del proyecto incluye la intervención artística de las escuelas Poeta Eusebio Lillo y Camilo Henríquez, ambas ubicadas en Conchalí, además de la Escuela Miguel José Zañartu en San Pedro de la Paz, Región del Biobío. En total, más de 400 estudiantes de entre 4° y 8° básico, junto a docentes, apoderados y equipos directivos, participan en un proceso creativo que busca plasmar la identidad, historia y valores de cada comunidad escolar.
El desarrollo de cada mural inicia con un taller participativo de ideas, donde estudiantes y profesores comparten relatos, símbolos y experiencias significativas de su entorno. A partir de este trabajo colaborativo, Söchting diseña una obra original que luego es pintada por la misma comunidad escolar, transformando los muros de los colegios en espacios de encuentro, expresión y orgullo colectivo.
“Mazda Colores que mueven nace desde nuestro propósito de acercar la creatividad a las personas. No se trata solo de arte, sino de construir vínculos, inspirar y dejar una huella positiva en cada comunidad donde estamos presentes”, señaló Marcela Kuhn, Gerenta de Marketing de Mazda Chile.
Por su parte, Payo Söchting destacó el valor social y emocional del proyecto: “Para mí, este proyecto es una oportunidad de conectar el arte con la gente. No es solo pintar un muro, es escuchar sus historias y darles forma y color. Ver cómo se transforman los espacios y las miradas es lo más valioso”.
En línea con la visión sustentable de Mazda, el proyecto incorpora además un fuerte componente ambiental: los murales se realizan con pinturas certificadas de bajo impacto, libres de contaminantes y con baja concentración de material particulado. Estas pinturas integran el aditivo nanotecnológico Photio, que convierte las superficies en purificadores de aire, contribuyendo activamente a la reducción de contaminantes atmosféricos en los entornos intervenidos.
Con su primera fase en pleno desarrollo, “Mazda Colores que mueven” aspira a convertirse en una iniciativa de alto impacto social y creativo, que continuará creciendo en 2026 con nuevas escuelas, comunidades participantes y oportunidades para acercar el diseño a más personas.
Con ello, Mazda reafirma su convicción de que el diseño, cuando se conecta con un propósito, tiene la capacidad de abrir caminos, inspirar y transformar positivamente los espacios donde está presente.
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