BAHIA INGLESA.- Septiembre 1 de 2011.- Al día siguiente de nuestro arribo a Bahía Inglesa, teníamos en nuestra agenda la presentación de un nuevo integrante de la familia de camionetas Chevrolet: se trata de la sexta generación de la D-Max E4, la que llega desde Tailandia respaldada por hecho de que una de cada cuatro camionetas que se venden en Chile es Chevrolet, marca que a comercializado sólo en nuestro país más de 205 mil unidades durante las últimas dos décadas.
Estéticamente no guarda mayores diferencias con su predecesora, salvo la inclusión de una toma de aire para el turbo intercooler sobre el capó y que los espejos retrovisores externos son con carcasa cromada (presentes en dos de las tres versiones que se comercializan), la inclusión del monograma LS en las puertas delanteras bajo los espejos, el reemplazo de la antena incorporada en el pilar delantero por una corta central negra, el abandono de las llantas de aleación por las de acero. Todas calzan neumáticos Bridgestone de medida 225/75 R15 en las versiones 4×2 y 245/70 R16 para la 4×4. Otro pequeño cambio es que el parachoques trasero, que también cumple la función de pisadera, ahora va pintado en color negro en todos los modelos.
La nueva D-Max exhibe un diseño robusto sin caer en la exageración. Su frontal destaca por los dos grandes ópticos dispuestos verticalmente, acompañados por una gran máscara central con un vistoso listón cromado en cuyo centro destaca el logotipo Chevrolet. El parachoques se mantiene intacto con los dos neblineros redondos en cada extremo.
Lateralmente destaca por sus pasos de ruedas anchos, los nuevos espejos cromados (de dimensiones idénticas a su predecesora). La zona de carga puede transportar hasta 1.120 kilos en las versiones 4×2 y de 1.050 kilos en la 4×4, gracias al empleo de una nueva suspensión trasera de ballestas rígidas.
Sin embargo los mayores cambios se encuentran bajo el cofré, donde el anterior propulsor de 3 litros dió paso a una planta motriz especialmente calibrada para Chile por ingenieros nipones a objeto de tener el mejor desempeño en todos los terrenos, lo que la hace sumamente flexible y potente, puesto que entrega un rendimiento sobresaliente aún en condiciones extremas, como es una altitud superior a los 4 mil metros sobre el nivel del mar o temperaturas menores a -15° C. Se trata de un nuevo motor turbodiésel de 2.5 litros Common Rail con 16 válvulas que entrega 136 caballos de potencia (6 más que la anterior) a 3.800 rpm e interesantes 294 Nm de torque a escasas 1.800 vueltas (200 rpm menos que la anterior). Cumple con la normativa de emisiones Euro IV y va acoplado a una eficiente caja manual de cinco velocidades.
Adicionalmente la nueva generación D- Max E4 mejoró los niveles de confort de conducción al bajar los niveles de ruidos y el desempeño del motor, lo que se traduce en un rendimiento de combustible más eficiente y uno de los mejores de su segmento.
«Hoy contamos con esta nueva D-Max E4 que ha potenciado notablemente su parte mecánica y que incorpora cambios en el diseño, lo que la convierte en un vehículo de alta calidad con uno de los costos de mantención más convenientes del mercado y con una garantía de 5 años ó 120.ooo kilómetros, única en el segmento», afirmó durante la presentación, Mariano Domínguez, gerente de marketing de Chevrolet.
La nueva Chevrolet D.Max E4 se comercializa en 3 versiones: D-Max HR WT 4×2 a $10.190.000 +IVA que considera de serie aire acondicionado, alarma sonora de luces encendidas, dirección asistida, apertura de tapa bencina desde el interior, cobertor de piso de vinyl, defroster trasero eléctrico, Radio CD/MP3 con dos parlantes, suspensión Hi Ride,espejos negros, parachoques negros tacómetro, volante regulable en altua y antena en pilar, entre otros elementos. Le sigue la D-Max HR 4×2 DAB ABS a $11.150.000 + IVA que agrega antena corta central, neblineros delanteros, parachoques del color de la carrocería, espejos cromados, pack eléctrico (vidrios, cierre y espejos), cobertor de piso de alfombra, guantera con luz, doble airbag frontal y sistema de frenos ABS. Finalmente tenemos la D-Max E4 4WD DAB ABS a $12.360.000 + IVA que agrega, selector electrónico de modalidad tracción 2WD, 4H y 4L, doble airbag frontal y sistema de frenos ABS. Según nos puntualizó Mariano Domínguez, «esperamos vender del orden de las 400 unidades mensuales de la nueva D-Max».
Impresiones de manejo
Tuvimos oportunidad de poder probar en un tramo de la ruta que comprendió suaves trepadas por zonas de arena, la nueva D-Max 4wd DAB ABS, el puesto de manejo es muy amigable con quien la conduce, con todos los mandos al alcance de la mano, con un tablero dotado de indicadores precisos y fáciles de leer. Se extraña eso si la presencia de mayor cantidad de portaobjetos o bolsillos en las puertas para los amantes de la funcionalidad. Las terminaciones mejoraron bastante, como por ejemplo el detalle de los tiradores de puertas internos cromados, en relación a la generación anterior, presentando materiales más duraderos que elegantes
El hecho de contar con dirección asistida nos facilitó aún más nuestras maniobras conductivas siguiendo un sendero bastante arenoso, es bastante precisa, manteniendo una velocidad de circulación no menor a los 40 km/hr en modalidad 4×4 Hi y Low, percibiendo como la misma arena trataba de desviar nuestra trayectoria. En un momento debimos deternos para tratar de divisar al resto de la caravana, y reiniciar la marcha sin advertir la menor presencia de pérdida de tracción gracias a sus generoso torque de 294Nm obtenido desde apenas 1.800 rpm. Al enfrentar las trepadas bastaba con tomarlas con cierta velocidad para superar el obstáculo sin mayor contratiempo. En primera y segunda la camioneta se siente lenta y ruidosa, pero en tercera marcha despliega una fuerza descomunal. No espere correr como una cebra, pero si de disfrutar de una experiencia de manejo consistente.
La suspensión, durante el tramo que la conducimos fue sometida a un trabajo duro, soportando estoicamente las irregularidades del camino, aunque advertimos cierta tendencia al rebote del tren posterior, lo que fue corregido con el volante. Eso sí debemos advertirles que no todo es suavidad en esta camioneta, hay que tener mano firme para insertar los cambios y piernas fuertes para operar los pedales.
A modo de corolario, podemos señalar que la nueva Chevrolet D-Max E4 sigue fiel a su tradición que la ha hecho la camioneta preferida de muchos: confiabilidad y robustez a toda prueba, todo ello sin dejar de lado el grado necesario de confort a sus ocupantes.
Por Raúl Farías D´H.; Destacados News
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