Toyota Motor Corporation, a contar de este mes, es el primer fabricante en el mundo que emplea la biohidrina, una goma biosintética de nuevo desarrollo que se usa en la producción de tubos flexibles usados en motores y cajas de transmisión.
Esta iniciativa se enmarca dentro de una serie de metas fijadas por Toyota en octubre pasado, las que forman parte de la hoja de ruta que la compañía denomina «Desafío Medioambiental Toyota 2050», en pos de la sostenibilidad del medioambiente.
Esta goma se fabrica en base a biomateriales de origen vegetal. En vista de que las plantas absorben CO2 de la atmósfera durante toda su vida, se estima que los biomateriales logran reducir en un 20% las emisiones durante el ciclo de vida del material, comparada con la goma de hidrina convencional, que se fabrica en base a petróleo.
Los primeros Toyotas en ser fabricados con componentes de este tipo, saldrán desde las líneas de producción en japón durante este mes, estimándose que llegue a todos los modelos que se fabrican en el país del Sol Naciente a finales de este año.