Probamos la versión con motor 1.5 litros VVT de 103 CV, que no destiñe. Está orientado hacia jóvenes que buscan su primer auto o familias con pocos hijos. Probamos la versión LE con un precio de $6.190.000 que conjunta una plataforma muy equilibrada y terminaciones sobre la media dentro de los productores chinos. Compite con el Kia Rio, Hyundai Getz, Toyota Yaris, Suzuki Swift y Renault Sandero.
Desde inicios de esta década que China se ha convertido en el quinto país fabricante de automóviles. Las empresas privadas de este sector han surgido como las más emergentes de la industria de ese país. Dentro de todo esa vorágine nació en 1990 Greal Wall Motors (GWM).
Great Wall fue la primera marca china en llegar a Chile (2007) y es representada por Derco S.A. Dentro del pool de productos están las camionetas Socool, Wingle, Deer, la SUV Safe y CUV y los el citycar Peri y el hatchback mediano Florid, que testeamos en su versión full LE con un precio de $6.190.000.
Este modelo compete con Kia Rio, Hyundai Getz, Toyota Yaris, Suzuki Swift, Renault Sandero, Chery Skin. Está orientado hacia jóvenes que buscan su primer auto o familias con pocos hijos. Cuenta con una garantía de 2 años o 50.000 kilómetros.
LA PRUEBA DEL FLORID
El Great Wall Florid es un hatchback compacto de cinco puertas, propulsado por un motor bencinero de 1.5 litros, 103 HP de potencia a 6.000 rpm, un torque máximo de 138 Nm a 4.200 rpm, de 4 cilindros en línea, caja de transmisión mecánica de 5 velocidades, que cumple con tecnología EURO IV y que tiene un consumo promedio aproximado de entre 13 y 15 kilómetros por litro.
Al testearlo, y pese a tener un nuevo motor 1.5 litros notamos que su planta motriz sigue siendo algo justa para sus dimensiones. Entrega una sensación de manejo de monovolumen debido a la altura de manejo y lo ancho de la plataforma.
Su motor 1,5 litros, sobre 4.000 RPM se muestra con una buena elasticidad en carretera. Las relaciones de la caja son largas. En carretera es estable y bien aislado pero con una dirección «poco comunicativa», sin embargo que manifiesta una mejora frente a otros modelos de ese origen, en especial en una asistencia de la dirección menos «blanda».
Sus medidas son 3.907 mm de largo, 1.521 mm de altura, y 1.694 mm de ancho con una capacidad de carga del maletero de 330 litros, o bien de 1.038 litros con los asientos traseros abatidos.
Sus terminaciones son sobre la media en los productos de ese origen. La ergonomía interior es óptima, caben cuatro adultos cómodamente tanto por la altura y ancho disponibles. Lo negativo es la visibilidad hacia atrás, los apoyacabezas son muy grandes lo que dificulta la visibilidad. Además los espacios para guardar cosas son escasos, como el de las puertas, de espacio muy chico y angosto.
El equipamiento incluye cierre centralizado, aire acondicionado con filtro de polen, alzavidrios eléctricos, apertura remota multifunción, radio CD con entrada de MP3 y seis parlantes, neblineros traseros y delanteros, espejos eléctricos, regulación de altura de luces, control de radio al volante, spoiler trasero, sensor de retroceso y llantas de aleación.
En el item seguridad cuenta con doble airbag, frenos ABS con EBD, barras protectoras en las puertas, alarma de cinturón de seguridad, columna de dirección colapsable e inmovilizador antirrobo, entre otros.
En suma un hatchback interesante, dinámico, cómodo y con terminaciones cada vez más cercanas a vehículos con mayor tradición en nuestro mercado. Un paso más para esta floreciente industria automotriz china, que ya en Chile nos tiene acostumbrados a la constante llegada de modelos, cosa que hace unos años era una utopía.
LO BUENO:
Mejoras en motorización
Terminaciones
Consumo
Estabilidad en carretera
LO MALO:
Dirección poco comunicativa
Falta de espacios para guardar cosas
Mala visibilidad hacia atrás
Fuente: Por Mauricio Carvallo, Destacados News