Probamos este moderno «muscle car» que tiene 42 años de trayectoria y es considerado como un vehículo que marcó un antes y un después en la industria automotriz. Su diseño, plataforma y por sobre todo su extraordinario motor 6.2 litros de 426 caballos marcan la pauta de este verdadero bruto del camino.
Estamos en tiempo de vehículos cada vez más eficientes y ecológicos, pero ¡que importa!, si estamos frente a un modelo que desata las más fuertes pasiones y tiene un rendimiento deportivo-musculoso realmente excepcional.
Claro, porque la llegada del Chevrolet Camaro 2010 se contrapone al momento actual de la industria, y se trata de un puro y duro Muscle Car con motor V8, 426 HP y tracción trasera.
La espera fue larga. Tras meses de esperar por fin el Chevrolet Camaro llegó a nuestro país. Probamos este moderno «muscle car» que tiene 42 años de trayectoria y es considerado como un vehículo que marcó un antes y un después en la industria automotriz norteamericana y por cierto mundial.
La unidad que testeamos «SS» emplea un V8 de 6.2 litros (LS3) derivado del Corvette, con 426 HP acoplado a una transmisión de seis cambios provista por Tremec. Tiene un precio de $26.990.000.
ELEMENTOS CLÁSICOS
Tuvieron que pasar siete años (en 2002 se dejó de fabricar el Camaro) para que saliera la competencia en EEUU al Mustang (en el mercado desde 2005). El nuevo Camaro ocupa elementos de diseño de los viejos Camaro como diseño exterior y retro de la consola, volante y los instrumentos. Con ello logra reinterpretar de manera sublime lo que debiera ser un muscle car del nuevo milenio.
La ergonomía es en términos generales buena (pero adelante), la disposición de algunos mandos es algo extraña, como el sistema de calefacción, ya que dos grandes perillas agrupan las funciones del aire acondicionado, temperatura y hasta la calefacción para los asientos, pero es cuestión de acostumbrarse, ya una vez logrado eso son simples de operar.
La posición de manejo es bastante baja, la sensación es de estar muy hundido en el interior del auto y hay poca altura disponible, con una visibilidad muy limitada. Se aprecia hacia adelante un largo y extendido capó, en donde sobresalen la toma de aire. Hacia los lados se ve poco dado su poca superficie vidriada. Al mirar hacia atrás la cosa se pone peor, los estilizados espejos en conjunción con una línea de hombro prominente y los postes C bastante anchos hace de las maniobras de estacionamiento una tarea muy complicada (faltan sensores de estacionamiento).
El volante es muy grande y con un diseño retro. Hay muchos relojes con la herencia clásica del modelo en detalles del panel, los interruptores, las terminaciones e iluminación. La parte baja de la consola central incorpora 4 medidores análogos, que se ven bien, pero que no son prácticos al estar a la altura de la palanca de cambios y es necesario quitar la vista de la calle para revisarlos.
Atrás no es apto para dos adultos, por el del espacio para las piernas y el techo muy bajo obliga a ir con la cabeza agachada.
BRUTALIDAD PURA
Este V8 de de 426 HP logra nota excepcional. Sus 569 Nm de torque, es muy apropiado para quienes buscan obtener lo máximo de su motor. Es una planta motriz adictiva. Las aceleraciones son verdaderamente sorprendentes y no importa bajo que circunstancia nos encontremos el Camaro SS siempre tiene potencia de sobra. Segunda, tercera, cuarta, quinta e incluso en sexta marcha las recuperaciones son excepcionales y potencia sobra. A bajo régimen es muy amable con el consumo de combustible y el ronroneo del motor avisa a los conductores que abajo del capó habita una bestia. En los rebajes la caja es algo brusca, pero eficiente.
Su insonoridad interior sorprenden. No solo es un auto muy capaz en el terreno deportivo, sino que también es cómodo y silencioso. Asimismo las imperfecciones del camino son aisladas de manera correcta. La dirección es muy precisa, mucho más de lo que sugiere su sobredimensionado volante
Ya en el camino, el Chevrolet Camaro 2010 es una delicia desde cualquier perspectiva y los números del Camaro SS 2010 son serios: 0- 100 km/h en 4.7 segundos. La versión SS incorpora un diferencial de derrape limitado. El control de tracción y estabilidad pueden ser desactivados para permitir algo de deslizamiento en el eje posterior. Los frenos Brembo frenan rápido y mucho.
Los mecanismos electrónicos de estabilidad y tracción permiten llevar con seguridad al vehículo frente a aceleraciones bruscas. En curvas es noble y predecible, la suspensión independiente multilink atrás le permite doblar con seguridad, incluso con las asistencias electrónicas desconectadas, solo una corrección en la dirección y el Camaro encuentra el camino correcto.
En suma el Camaro 2010 logra sumarun conjunto bien logrado, un motor muy potente y un chasis afinado. Un Camaro que no solo luce bien, sino que es un deportivo en toda la extensión de la palabra. Un muscle car capaz en el terreno deportivo además de cómodo (para dos) y silencioso. Uno de los mejores muscle car de la actualidad.
LO BUENO:
Motor bestial
Recuperaciones, aceleraciones
Sonido del motor
Comodidad plazas delanteras
Diseño adictivo
Esencia muscle-car
LO MALO:
Mala visibilidad hacia todos los sectores
Limitada altura disponible
Fuente: Por Mauricio Carvallo G, Destacados News