Guardo el vago recuerdo en mi memoria, cuando para la edición 2012 del Salón del Automóvil, MACO (anterior representante de la marca), apostó por mostrar un ejemplar de su buque insignia, Superb, correspondiente a su segunda generación. Por mucho tiempo, al menos en nuestro mercado, el máximo exponente de la excelente tecnología checa, ha sido el Octavia.
Sin embargo, dentro de los agresivos planes de renovación de portafolio de productos, Porsche Chile SpA, importador y representante oficial de Skoda en Chile, apuesta por subir un escalón más, potenciando su presencia en el segmento D mediante la incorporación de Superb, berlina de estilo liftback (por su gran portalón que incorpora el vidrio posterior y tapa del maletero, que por lo demás va en sintonía con lo visto en el extinto Rapid sedán y Octavia.) Ya en su tercera entrega, la primera data de 2001, Skoda no duda en considerarlo como «el mejor Skoda de todos los tiempos», además de representar el punto culminante de la ofensiva de modelos, que aún no termina.
Desde inicios de este mes que estábamos virtualmente a la «caza» de un ejemplar que posase para nuestro lente, y además de tener la oportunidad de poder conocerlo en persona, lo que se concretó el viernes recién pasado, en la nueva sucursal de Porsche Las Condes (donde comparte Skoda y VW) en Av. Las Condes Nº 12.260. Allí nos aguardaba un flamante ejemplar 1.8 TSI Elegance en Gris Cuarzo Metalizado.
Este medio consultó con su importador acerca de los motivos que llevaron a la marca a estar presente en un segmento de mercado que cada vez reduce más su participación de mercado, como lo es el de las berlinas:“Este nuevo sedán Premium viene a abrirnos la puerta en un nuevo segmento del que no participábamos, con una apuesta de diseño, motorizaciones, equipamiento y tecnología de un nivel muy superior. Esto, va de la mano con nuestra estrategia de ampliar nuestro line up y fortalecer nuestra presencia en el mercado local, a través de productos de gran calidad y prestaciones, llegando a nuevos públicos”, nos afirman desde Skoda Chile.
Este modelo compite con linajudos representantes del segmento como son: Honda Accord, Mazda 6 (versiones más equipadas, incluyendo la diésel 2.2 GT), Nissan Altima, Opel Insignia, Peugeot 508 2.0 HDi, Subaru Legacy y Toyota Camry. No por nada más de 700 mil unidades de este modelo ruedan por todo el mundo.
Ya tendremos oportunidad de ponernos tras su volante, por lo que ahora nos circunscribiremos a las impresiones que nos causó su propuesta estética. Su diseño luce muy europeo, pero sin llegar a ser ostentoso ni lujoso. Un frontal presidido por la clásica calandra de Skoda con lamas verticales cromadas. El único juego es el trazo inferior de sus ópticos principales.
De costado vemos que va en sintonía con su hermano menor Octavia, pero con la presencia de los marcos de las ventanas cromados, y sus «Privacy Glass» en las puertas traseras. Llamativas resultan sus llantas de aleación Pegasus, que albergan neumáticos Hankook Ventus Prime 2 de medida 225/40 R18.
Su zaga es típicamente Skoda, con una antena fija tipo aleta de tiburón a tono con el color del auto, mientras que el techo desciende suavemente a lo largo del portalón trasero integrado en una única pieza, con la originalidad de ofrecer un limpiaparabrisas posterior (elemento cuya presencia agradecemos y que ya hemos visto en Rapid y Octavia.), sumado a la presencia de las características luces en forma de C con tecnología LED. Este modelo emplea la plataforma MQB del Grupo VW, la misma presente en el Golf y en el Passat, éste último no disponible en Chile.
Pero es al abordarlo, cuando caemos en cuenta de uno de sus puntos fuertes: el impresionante espacio interior, donde el espacio disponible para las piernas alcanza los 157 mm. Otro punto a su favor, es el hecho de que al ser un Liftback, dispone de un portaequipajes con capacidad de 625 litros, 30 litros más que su predecesor. Su operación resulta del todo sencilla, gracias a su sistema de apertura y cierre eléctricos, además de poder comandarse a distancia con un simple click sobre el mando remoto.
Por dentro luce con detalles que va en línea con otros modelos del Grupo VW, bien terminado, con la presencia de materiales de alta calidad, pero sin llegar a ser un auto de lujo. Lujo austero, pero impecable. Nos gustó que contase con freno de estacionamiento accionado eléctricamente.
Su nivel de equipamiento es digno de un auto de nivel superior, lo que se ejemplifica en la presencia de elementos como: luces bixenón con regulación de alcance automático, luces diurnas LED, lavafaros, techo eléctrico, tapiz de cuero, asientos delanteros eléctricos, memoria en el asiento del conductor, asientos delanteros calefaccionados y ventilados, climatizador bizona, sistema Keyless, botón de encendido, entre otros, todos presentes en ambas versiones signadas bajo el acabado Elegance.
Los amantes de la hiperconexión agradecerán la presencia de su sistema de audio Canton con pantalla táctil de 16.5 cm, que permite enlace BT, USB y AUX. con nada menos que doce altavoces, incluyendo un altavoz central y un subwoofer en el maletero, su potencia total de 610W, lo convierte en una suerte de sala de conciertos sobre ruedas. Lógicamente es compatible con Mirror Link.
La oferta de motores, corre por cuenta de dos propulsores selectos del grupo: Uno bencinero y otro turbodiésel. El primero corresponde al 1.8 TSI con 150 CV de potencia y 250Nm de par, mientras que el diésel corresponde a un 2 litros con 190 CV y 400 Nm de par. Ambos van acoplados a cajas automáticas del tipo DSG (Doble embrague) de siete y seis marchas respectivamente.
En el item de seguridad, destaca El Dynamic Chassis Control (Control dinámico del chasis) (DCC) evalúa de forma continua y responde a distintas situaciones de conducción (frenado, aceleración, giro), adaptando las características de la amortiguación y la dirección. Como parte del menú de infotainment, te permite seleccionar uno de los cuatro modos, Normal, Confort, Ecológico o Sport en función de las necesidades específicas del conductor. Ambas versiones disponen de 6 bolsas de aire, controles de estabilidad y de tracción, entre otros elementos.
Versiones y precios
Skoda Superb 1.8 TSI Elegance DSG7 $22.990.000.
Skoda Superb 2.0 TDI Elegance DSG6 $23.990.000.
La marca proyecta colocar del orden de 25 ejemplares en el curso de 10 meses, donde las variantes bencineras representarán un 60% de las ventas. La gama de colores está compuesta por las siguientes tonalidades: Gris,Gris Oscuro, Beige, Negro, Plata, Blanco, Azul Pacifico.
Fotos: Raúl Farías; Skoda Superb 1.8 TSI Elegance en Gris Cuarzo Metalizado.
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