El Rally de Mongolia tendrá entre sus autos participantes uno muy especial. Se trata de un Nissan Leaf especialmente modificado para participar en esta dura competencia que abarca un recorrido de 16 mil kilómetros medidos entre el Reino Unido y Mongolia, evento que tendrá lugar entre el 18 de julio y el 1 de septiembre próximos.
Las mejoras pasaron por la incorporación de neumáticos estrechos Maxsport RB3 con llantas Speeline SL2 Marmora, especiales para lograr un mejor rendimiento sobre superficies no asfaltadas. También se le adicionaron placas soladadas a la zona baja de las horquillas, cables de frenos trenzados, gudafangos y una protección de aluminio para enfrentar las zonas más complicadas.
Sobre el techo lleva una caja portaequipajes especialmente acondicionada, a la que se le adicionó una barra de luces LED, capaz de generar 16.400 lumen de iluminación delantera de bajo voltaje, la que resultará de utilidad durante el recorrido por las zonas más remotas.
En virtud de que la travesía es extensa, las modificaciones internas se concentraron en reducir el peso y tener más espacio de almacenamiento. Adelante sólo se incluyeron pisos de goma, mientras que atrás se prescindió del asiento y los cinturones, rebajando su peso en 32 kilos. En el maletero se ageró un kit médico y un extintor de incendios.
El Rally de Mongolia es una prueba benéfica de 16.000 km a través de las montañas, el desierto y la estepa de Europa y Asia, que tiene lugar cada verano y que empezó en 2004. El evento es organizado por The Adventurists (http://www.theadventurists.com), que gestiona varios actos que ya han recaudado 5 millones de libras para causas benéficas hasta la fecha. Cada equipo del Rally de Mongolia debe recaudar un mínimo de 1000 libras (CLP $873.000) para causas benéficas.
Las reglas indican que los participantes deben conducir un auto compacto con motor de menos de 1 litro, lo cual hará que la prueba resulte más interesante debido a las mayores probabilidades de avería, lo que significa que los conductores pueden interactuar con la población local durante el camino. El conductor no cuenta con soporte adicional: no hay «apoyo en ruta». Los participantes deben solucionar sus propios problemas.
Fuente: Nissan.