Chevrolet reveló en Brasil la tercera generación de su camioneta compacta Montana, que ahora llega en formato doble cabina, para hacerle frente a competidores de la talla de una FIAT Toro/RAM 1000 o Ford Maverick, apostando por una estética atractiva, buen contenido tecnológico y gran versatilidad.
En términos de diseño, podemos decir que el modelo final hace honor a la serie de renders y adelantos dados a conocer por la marca, con un frontal en el que predominan luces LED divididos en dos zonas, sumado a la presencia de una gran grilla y toma de aire, que recuerda en gran medida a la proa del Blazer actual.
En la versión Premier, los acabados de sus llantas y molduras están oscurecidos; en la versión LTZ son predominantemente cromados, dando a cada una su propia identidad.
De costado, llama la atención por las características líneas de su carrocería y el equilibrio de proporciones entre el compartimiento motor, su cabina y la caja de carga. Además de entregar un mejor aspecto, estas superficies desarrolladas con la ayuda de supercomputadores, también brindan beneficios aerodinámicos.
La parte trasera está marcada por elementos que hacen referencia a su robustez, sin dejar de lado el refinamiento y la funcionalidad. El principal diferencial estético del vehículo es la barra con acabado en negro brillante que conecta las luces traseras, formando un elemento único.
También destaca el logo “Chevrolet” estampado en bajo relieve en la tapa de la caja de carga, que tiene una especie de perfil aerodinámico integrado en la parte superior. La tapa tiene apertura por botón eléctrico y el sistema de alivio de peso en apertura. El paragolpes fue diseñado para facilitar el acceso a la caja de carga, que Chevrolet denomina como «Multi-Flex, que le permite ser usada como un gran baúl con 874 litros de capacidad.
Su habitáculo nos recuerda al de un SUV por el acabado sofisticado de sus partes, y el ambiente más tecnológico que se suele ofrecer en ese segmento.
La central multimedia está ganando cada vez más relevancia en los automóviles, y este tema ha recibido una especial atención por parte de los diseñadores. Tanto es así, que estrena con el concepto de pantalla MyLink totalmente integrado en el cuadro de instrumentos, tal y como ya lo hacen los modelos más recientes de la marca. El sistema multimedia está en la parte superior del panel y su pantalla de 8″ al estar en posición horizontal, facilita la lectura principalmente de mapas de navegación y reduce la posibilidad de distracción al volante.
La mecánica es compartida con Tracker, con un motor a gasolina de 1.2 litros turbo, que entrega 133 CV de potencia y 210 Nm de par, gestionados por una transmisión manual o automática de seis velocidades.
En el apartado de seguridad, considera según versión: 6 bolsas de aire, alerta de frenado y de punto ciego, ESP, TCS, ABS con EBD, asistente de frenado de urgencia, anclajes ISOFIX, TPMS, entre otros.
Fotos: Chevrolet Media
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