Un gran número de aficionados y representantes de los Scuderia Ferrari Club de toda Europa se han dado cita hoy en el Museo Ferrari para inaugurar la exposición «Michael 50» en homenaje a este campeón.
El homenaje de Maranello a Michael Schumacher por su 50º cumpleaños se plasma en una exposición especial que narra su extraordinaria carrera y su inigualable trayectoria en la historia de la F1: 7 títulos mundiales, 91 victorias, 155 podios.
En la Sala delle Vittorie se exhiben algunos de los monoplazas más importantes de Ferrari pilotados Schumacher en sus once años con la Scuderia. Desde el F310 de 1996, con el que Schumacher ganó tres GP en su primera temporada con el Cavallino Rampante, hasta el F399, con el que el equipo más longevo de la historia de la Fórmula 1 inauguró un extraordinario ciclo de victorias en 1999, que terminó con el título de Constructores.
También está el F1-2000 de la legendaria «Alba Rossa», cuando Michael volvió a ganar el campeonato del mundo en Suzuka 21 años después de Jody Scheckter. No podían faltar el F2002 y el F2004, los coches de los récords, y el 248 F1 de 2006, con el que conquistó en China su última victoria, la número 72 con Ferrari.
Los aficionados también tendrán la oportunidad de descubrir una faceta menos conocida de Schumacher, la de desarrollador. Después de dejar la Fórmula 1, el campeón de Kerpen se quedó en Ferrari no sólo para ayudar a la Scuderia, sino también para contribuir al desarrollo de algunos coches de carretera, como el 430 Scuderia en 2007 y el Ferrari California en 2008.
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