La actualización de media vida de la sexta generación del compacto alemán ya es una realidad. La puesta a punto abarca su estética, interior, equipamiento y propulsores para el que se considera como el hermano pequeño del Volkswagen Golf.
¿En qué cambia el Polo 2021?
El grueso de los cambios se concentra en su frontal, el cual fue adaptado al nuevo lenguaje de diseño del fabricante alemán. En particular, se rediseñó el parachoques, el portalón trasero, los faros con tecnología LED ahora de serie y los grupos ópticos traseros. Gracias al nuevo diseño de los faros, se consigue una firma luminosa de día y de noche muy llamativa
Por primera vez, la barra transversal de la parrilla del radiador también forma parte como tira LED de esta llamativa firma en combinación con los nuevos faros LED Matrix IQ.LIGHT, acompañado de una barra transversal de la parrilla del radiador con una tira LED.
Se ofrecerá en ocho colores, tres de ellos nuevos: Ascot Grey, Kings Red, Vibrant Violet. De los ocho, la mitad se pueden combinar con un techo negro (Roof Pack).
En el interior, nos encontramos con una cabina más digital y conectada. Es por ello que el «Digital Cockpit» ahora forma parte del equipo de serie, un volante multifunción también de serie y de nuevo diseño, sistemas de infotainment de última generación con unidad de control online (eSIM) y «App-Connect Wireless» (según equipamiento).
Las versiones equipadas con «Climatronic» a bordo, también dispondrá por primera vez de un panel controlado por superficies táctiles para el climatizador automático, como se ofrece ya en modelos superiores como Tiguan.
La gama de motores contempla cuatro alternativas a gasolina y una bifuel. Las potencias van desde los 80 a los 110 CV. Dependiendo de la versión, podrá ir acoplado a una caja manual o bien una automática DSG (doble embrague) de siete marchas. En ciertos mercados se ofrecerá un motor de 1 litros TGI con 90 CV, pudiendo operar con gas y gasolina.
Fotos: Sala de Comunicaciones Volkswagen
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